Pintó bajón. Bajón pesimista, lo más parecido al enojo que conozco.
Lo malo de los momentos así es que entro a darme cuenta de varias cosas. De lo que soy, y de lo que no soy.
¿Qué soy? Una tarada que más de una vez le saca el cuero a la gente, que se cree la perfección en persona, y no es más que eso: una idiota sacando el cuero. Alguien que habla demasiado, pero que nunca dice lo que piensa (tiene miedo de quedarse sola, o que le bajen los dientes de una piña). Soy una imbécil que se cree madura pero que no se asoma ni cerca al modelo de madurez.
¿Qué no soy? No soy linda, soy fea y me la banco (hasta que alguien me lo dice y me dan ganas de matarme). No soy atractiva en ningún sentido de la palabra; debo dar vergüenza ajena, sinceramente. No soy alguien que le caiga bien a la gente, indudablemente; son pocos los que disimulan que soy piola. No soy buena en nada, no cabe duda de que lo que hago es al pedo .
Me quejo de todo. Estoy rodeada de gente que me recuerda lo mal que resuelvo las cosas. No me destaco en ningún aspecto. Doy vergüenza. Me molesta hasta lo menos molesto.

Tengo vergüenza, me da asco describirme así, pero es lo que soy.-

Yamila A. González