Random is not whatever

Es que noviembre llegó y lo primero que hizo fue empezar a histeriquear. Lo que pasa es que terminamos octubre PUM PARA ARRIBA. Muy felices, con la primavera a full. Y lo que pasa también es que la razón de ese pumparaarriba tiene nombre y apellido y lo vengo fichando desde el curso de ingreso. Y lo que pasa es que cuando estás muy pumparaarriba podés caerte y estar pumparaabajo porque esa razón del pumparaarriba con nombre y apellido te tira pumparaabajo. 

Una vez más caigo en la cuenta de que todo es cuestión de miedo. Del maldito miedo. Miedo a que no salga todo como querés desde el curso de ingreso. Miedo que te lleva a querer controlar todo para que salga como querés desde el curso de ingreso. Miedo a no llegar a conseguir eso que querés desde el curso de ingreso.

Pero no importa. A veces, casi siempre, no importa. Porque hay cosas, no sé si más importantes, pero mejores. Y puedo dar ejemplos hasta el cansancio. Que tu amiga te llame de 800km de distancia para cantarte "El Ratón" con el Piti en vivo de fondo. Que haya empezado noviembre, no de la mejor manera, pero que haya empezado. Que en 17 días tu mejor amiga esté acá, cerquita. Que no pase NADA cuando mirás fotos de gente que mejor no nombrar. Es más, que hayas borrado su foto de la carpeta "descargas". Que en menos de un mes termines con todas tus pseudo-obligaciones, aunque sea un mes por demás agitado. Que tengas razones extra académicas para ir a la facu. Que ya empieza a sentirse el calorcito. Que ames tu carrera. Que tus compañeras sean las mejores del mundo. 

Se trata de eso, se trata de seguir. Se trata de estar pumparaarriba. Se trata de querer estar pumparaarriba, aún cuando el mundo esté muy pumparaabajo. Se trata de los amigos, de las fotos, de la carrera, de la facu, de la gente de los cursos de ingreso, de las noches de excesos, de lo que querés que sea.